Es cuestión de actitud. Según sea tu actitud así afrontarás los acontecimientos.
Si nos esforzamos en ver el lado positivo en todo lo que nos sucede; hasta la muerte puede ser entendida como una liberación, como un paso a otro estado mejor.
Lo que determina nuestros sentimientos sobre los sucesos que ocurren en nuestra vida no son los propios sucesos, sino el significado que nosotros les damos.
El proceso de pensamiento (de dialogo interno) no es más que una serie de preguntas que nos hacemos constantemente. El subconsciente nos está siempre haciendo preguntas, y las preguntas generan emociones (estados de ánimo). Si afirmamos que algo es imposible nos estamos haciendo una pregunta equivocada y auto limitativa. Ante el desaliento y desesperanza, preguntémonos que tiene de bueno y de positivo una decepción.
Procuremos que la emoción no determine nuestro pensamiento sino que, por el contrario, el pensamiento controle la emoción con la finalidad de neutralizarla y potenciarla. Seamos positivos y optimistas.
¿Por qué me pasa esto a mi? No es más que una pregunta que resta energía. Ante un pensamiento negativo, preguntémonos ¿Qué podría de haber de bueno en esto?
Lo ideal es que el pensamiento, momentáneamente negativo, nos lleve a sentir que no hay NADA de malo ni NADA de bueno en ello.
La NADA es la sabiduría de la esperanza. Contra la NADA no hay NADA porque... la NADA eres tú.
NADA
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Hace tiempo que comprendí lo que dices. Siempre que me ocurre algo que en principio me parece injusto o que no comprendo, lo que hago es esperar… Esperar a que la mirada enfoque bien eso que se distorsiona a mi alrededor hasta que comprendo que era necesario que estuviera ahí por alguna razón.
ResponderEliminarLa bola que tiene que alcanzar el agujero está parada en una esquina. La jugada ya ha sido calculada en todos sus movimientos. El impulsor, ahora, toca una de las bolas. Ésta comienza a rodar hacia la siguiente que en su movimiento preciso tocará otra… y esa otra irá a por otra. Y así, el camino hasta el objetivo irá describiendo un laberinto sin sentido aparente, hasta que, por fin, la bola que debía alcanzar su lugar, lo hace. Es entonces cuando todo tiene un porqué: desde ese primer movimiento tan alejado hasta el final. Yo he descubierto este “juego” tan sorprendente. Y cuando las bolas van tocando otras, sigo su rastro intentando adivinar a dónde me llevan. Es divertido.
Muchas gracias por estas sabias palabras.
Me voy al trabajo (otra vez tengo doblete, pero seguro que es por algo…).
Un abrazo con impulso.
PARA MERCEDES
ResponderEliminarComo siempre eres muy generosa en tus comentarios. Me alegra que mis breves reflexiones, que en realidad no son NADA, sirvan de inspiración para textos más profundos y extensos. Lo que he querido decir es simple y se complementa con otra máxima que para mi es fundamental: ACCIÓN positiva, no esperar. Darle impulso a cada una de las bolas. Ser dueño de tu destino...aunque al final todo quede en NADA.
Gracias, y un cálido abrazo.
NADA
PARA JOSE IGNACIO
ResponderEliminarLa gratitud,la generosidad y el alma limpia,son VERDADES metafísicas.Por eso el egoismo es la forma más perfecta de amar. Se que esto es dificil de entender, por eso lo digo, porque no tengo intención ni interés en que se entienda. (aunque algún día trataré de explicarlo)
¡Tienes que ponerte el "mundo por montera"!
Saludos.
NADA
¿Te complacen esta serie de comentarios banales, estorotipados y avidos de lisonja reciproca?
ResponderEliminarCreo que vales más que esto.
PARA ANÓNIMO
ResponderEliminarLa verdad es que me son indeferentes. Pero creo que es de una falta de objetividad manifiesta afirmar que -por ejemplo- el comentario de Mercedes es una reflexión banal y esterotipada, ya que su texto es incluso más extenso que la propuesta inicial. Me da que estás tirando piedras en tu propio tejado.
Tampoco creo que Jose Ignacio haga un comentario con la idea de que yo visite su blog y le diga cuatro cosas agradables.
No me coneces. Yo no valgo NADA porque, obviamente, soy NADA.
...de NADA
NADA QUE TE NADA:
ResponderEliminar"¿Te complacen esta serie de comentarios banales, estorotipados y avidos de lisonja reciproca?
Creo que vales más que esto."
Este no es mi comentario anónimo, es el comentario que usted, ex Bruja Bigota, ha dejado en un post de la señora Mercedes dirigiéndose a otros comentaristas que nada tienen de banales y menos de lisonjeros o esteriotipados.
¿Tirando piedras... en el tejado de quién?
Ten cuidado, te has cambiado el nombre, pero algunos recordamos tus "lisonjas" de aquel "sábado" que te encargaste de joder a los alumnos del Desván con tus impertinencias.
En la blogosfera también, además de brujas, existen héroes anónimos que aman la justicia.
UN HÉROE ANÓNIMO...DE NADA
PARA ANONIMO
ResponderEliminarEsto resulta divertido ¿Qué tengo yo que ver con esa tal Bigota? ¿Qué te hace presumir que yo soy ella? Posiblemente seas tú.
Desconocía el comentario de la Bigota pero en vista de tus veladas amenazas(?) he repasado las entradas del blog Paseos por el Alambre y, efectivamente, allí está firmado por esa enigmática señora o señor.
En honor a la verdad, los comentarios que en esa ocasión han dejado las personas que visitan ese blog, son más bien cortos y muy similares, quizás ello provocó que alguien lo resaltara de forma impertinente.
Insisto. En lo que mi blog atañe, creo que el mismo comentario, enviado por ti justamente después del extenso y bien razonado escrito de Mercedes, necesitaba ser contestado con contundencia para hacer honor a la generosidad de Mercedes al sumarse a mi humilde reflexión.
Tengo la sensación que eres un o una adolescente. La frase "héroes anónimos que aman las justicia" por lo rimbombante y extemporánea muestra en claro rasgo de inmadurez.
Cálmate ¿Te va la vida en esto?
NADA
¿Podríais dejarme en paz, por favor?
ResponderEliminarNADA, perdona que utilice tu chorrada de blog para contestar a ese ANÓNIMO que se te ha metido en él. Yo les gasté una broma a los seguidores del blog “Paseos por el Alambre” pero ya pedí excusas porque me he dado cuenta que los blogers que habitan en el entorno de la señora Mercedes carecen de sentido del humor. Se lo tienen creído de escritores. Tú, que dices defender la justicia, deberías de saber que la verdad va delante de ésta. Mientes cuando afirmas que me he metido con los alumnos del Desván. Nunca he dejado un comentario peyorativo en contra de los visitantes del Desván de la Memoria. Sólo una vez he dejado un comentario para contestar un artículo del “Diletante”que me pareció una “pasada”¡Y no veas como se puso la señora Mercedes! En fin, ella sabrá.
En cuanto a ti, NADA, sólo una pregunta ¿Qué tiene que ver el cordobés Romero de Torres, cuyo cuadro muestras en la entrada, con el retrato decadente que haces del escritor descrito en tu almibarada historia de niña cursi?